Hoy es necesario operar en medio del peso del tránsito descomunal, luchando contra la contaminación y el tráfico, los embotellamientos, la vieja y la nueva pobreza. Se trata de pensar en un modelo doble, de verticalización asociado a horizontalización compacta. De edificios altos multifuncionales (base de servicios y productiva, cuerpo con oficinas o residencias y remate con mirante, club, etc.) y barrios ecológicos con edificaciones mas bajas con lugares de encuentro, teatros, plazas, comercios, áreas verdes, etc. Pensar lo urbano hoy exige una perspectiva mucho mas humana. La diferencia entre metrópolis y megalópolis es la aceleración del crecimiento. Es necesario hacer convivir la mezcla de residencias con oficinas, con servicios, con espacios públicos congregadores; áreas centrales y barrios llenos de vida y áreas verdes de todo tipo y escala. Redefinir los espacios urbanos para acoger lo residencial, el trabajo, la cultura, el tiempo libre y la vida de barrio conectada a la vida metropolitana. Jorge Mario Jáuregui |