San Pablo

 

La ciudad de San Pablo, con sus 10,4 millones de habitantes dentro del municipio y 17 millones incluyendo la región metropolitana,  configura un  tipo de ciudad-región.

Es la capital del Estado de San Pablo y la ciudad más importante de Brasil, siendo una de las megaciudades del planeta. Junto con Ciudad de México, constituyen los dos mayores conglomerados urbanos de Latinoamérica.

Desde el punto de vista económico, cultural y político es considerada una ciudad global, una Metápolis que ejerce significativa influencia en los ámbitos regional, nacional e internacional. La bolsa de valores de San Pablo es uno de los “sismógrafos” que registra su importancia en el escenario mundial.
 “La Metapolis contemporánea constituye una realidad que traspasa y engloba, desde diversos puntos de vista, las metrópolis que hemos conocido hasta ahora, propiciando una nueva especie de aglomeración urbana hecha de espacios y relaciones multiplicados, heterogéneos y discontinuos; producidos por entidades urbanas cada vez menos vinculadas jerárquicamente… progresivamente asociadas a dinámicas deslocalizadas y fluctuantes referidas a las variables relaciones “residencia-producción-servicio-ocio”. 1

Con sus casi 6.000.000 de automóviles (un tercio de los cuales está en condiciones irregulares), los grandes corredores circulatorios y los embotellamientos de mas de 200 Km (casi una marca registrada de este enorme conglomerado) y también la “deselegancia discreta”2 de sus habitantes, ejerce su atracción sobre diferentes creadores 3 que buscan capturar rasgos de su fuerte personalidad.  

San Pablo no es, decididamente, una ciudad para peatones.  Este gran “cuerpo sin órganos”4 a pesar de eso se vuelve en si mismo un personaje y no apenas un escenario, con su característico estar en constante movimiento. Sao Paulo esconde la belleza atrás de la fealdad con algo de mágico, pues existe siempre el misterio de lo que está detrás de lo gris, de la mancha, de la contaminación.

Tal vez los únicos capaces de acortar el tiempo, entre la sucesión de espacios desagregados, sean los ‘motoboys’ y la nube de helicópteros que la caracterizan. En esta ciudad de “gran velocidad”,  el enjambre de motos de repartidores es lo único que se puede mover rápidamente entre las rendijas de los automóviles (paradojalmente siempre en marcha lenta o embotellados)  encarnando la dinámica de una ciudad desmesurada. Junto con la gran cantidad de helicópteros de los ejecutivos que cada día surcan su cielo.

A escala nacional representa el punto de confluencia del tránsito aéreo del país, con todo el potencial conflictivo que esto conlleva. San Pablo también es un gran cruzamiento de rutas y hace la conexión entre el norte y el sur de Brasil. Es la concentradora de poder político y económico con el mayor electorado del país y con su enorme movimiento comercial y financiero, y representa la “locomotora” que impulsa la economía nacional. Tiene una vida social muy activa y una agitada vida nocturna;  San Pablo se “acuesta tarde”. Una de sus características es la multiculturalidad y la multietnicidad que presentan gran permeabilidad entre las “diferencias”. Diferencias y particularidades que a veces están espacialmente identificadas, como los famosos “barrio japonés” (Liberdade) y “barrio italiano” (Bexiga) entre otros. San Pablo tiene una gran oferta cultural y es sede de dos Bienales: la Bienal de Arte Contemporáneo y la Bienal de Arquitectura.

San Pablo no tiene una significativa presencia de ascendencia afro, lo cual se traduce en una no-particularidad musical.  A diferencia de Salvador y Rio de Janeiro, en San Pablo no hay una música específica (afro-reggae en Salvador y samba en Río, por ejemplo) y la presencia física de negros en la ciudad es mucho menor. Por otro lado se nota la fuerte presencia de la migración de nordestinos llegados desde los Estados de Paraíba, Pernambuco y Ceará.

Historia Urbana

La ciudad de San Pablo tuvo una expansión urbana acelerada caracterizada por el pasaje rápido de una ciudad sin expresión ni nacional ni internacional hasta el siglo XIX, para constituir hoy el mas importante centro nacional y uno entre los 20 mas significativos en el ámbito internacional.

Localizada en la confluencia de los ríos Tietê y Pinheiros, el área central de la ciudad estuvo desde su origen condicionada por una accidentada topografía que incluye valles, áreas inundables, colinas y los propios ríos.

Durante dos siglos permaneció con sus características de pueblo pobre y aislado del centro de gravedad de la colonia y recién con la descubierta del oro en Minas Gerais las atenciones del reino se vuelven para ella. Fue fundada por colonizadores portugueses en 1553 como Vila de Santo André da Borda do Campo y en 1554 se construyeron las primeras casas en “taipa” (barro y caña). Se mantuvo como un poblado muy pequeño y sin ninguna importancia hasta 1711 cuando fue elevada a la categoría de ciudad, actuando como base militar desde donde partían las expediciones contra los indios.

Desde inicios del siglo XIX San Pablo se va convirtiendo en núcleo de actividades políticas, económicas e intelectuales. Hacia finales de ese siglo se produce un crecimiento vertiginoso de la ciudad y su población se duplica llegando a 240.000 habitantes. Cuando se agota el ciclo del oro a fines del siglo XVIII se inicia el ciclo paulista del azúcar y la ciudad pasa a funcionar como medio de canalización de la producción para el puerto de Santos.

A partir de mediados del siglo XIX San Pablo se expande por la implantación de la ferrovía para exportación de café, que conecta el puerto, la ciudad y el campo en cuyas tierras aledañas es cultivado, empleando en gran parte mano de obra inmigrante, principalmente italiana.
Es de este período la construcción del Edificio de la “Estación de la Luz”.


Museo de Ipiranga

Con el crecimiento industrial de la ciudad en el siglo XX, el área urbanizada se expande y surgen nuevos barrios residenciales ocupando las chacras aledañas.
La gran expansión industrial se dará, como en otras metrópolis latinoamericanas, durante la Segunda Guerra Mundial, a través de la exportación de materias primas y en el caso de San Pablo, principalmente de la exportación de café.

El carácter industrial de la ciudad se mantiene hasta inicio de la década del ochenta, donde se manifiesta una reorientación del desarrollo como centro financiero y de servicios acentuando su vocación metropolitana, evidenciada desde el “Plan de Avenidas “del intendente Prestes Maia que administró la ciudad entre 1938 y 1945.
Esta vocación metropolitana se expresa en la decisión de eliminar sus trazos provincianos y facilitar la accesibilidad y circulación entre áreas hasta ese entonces dispersas, del centro de la ciudad.

El Plan se basa en el trazado de un anillo perimetral delimitando el centro histórico, abriendo grandes avenidas junto con el túnel 9 de Julio, puentes y viaductos. Todo el área del Centro se unifica a través de estas obras de carácter infraestructural, monumental y de proyectos que contienen una estética de la movilidad que buscan la modernidad a través de la velocidad y de la eficiencia del cuerpo urbano.

Estas obras muestran formas que “exhiben, orgullosas, la potencia de la tecnología en imponer al medio el diseño que le sea más conveniente…notamos sin dificultad los sentidos que transpiran de esos equipamientos-como signos de modernidad, velocidad y eficiencia-para la metrópolis naciente. Estos equipamientos significaban antes de más nada verdaderos actos de fe en la práctica ilimitada de domar a la naturaleza por la tecnología. Fundados en un imaginario de la experiencia metropolitana, alimentado por películas como Metrópolis  de Fritz Lang entre otros, en los cuales la profusión de elementos de pasaje y conexión crean una especie de estética del desplazamiento, es que estos equipamientos obtienen su carácter simbólico” 5.

En la década del 1920 San Pablo se consolida como ciudad industrial y el Centro comienza a verticalizarse y especializarse en actividades comerciales, iniciando la pérdida de la función residencial. En 1920 la ciudad tenía 580.000 habitantes 6.

En 1922 tuvo lugar en la ciudad el famoso evento que dio origen al modernismo en el país. La “Semana de Arte Moderna” fue el acontecimiento a través del cual jóvenes artistas se unieron para revolucionar los conceptos de arte, sacudiendo el inmovilismo cultural e incentivando el nacionalismo, al mismo tiempo en que buscaban su sintonía con las vanguardias europeas. El texto “Pauliceia desvairada” de Mario de Andrade, líder y principal teórico del movimiento, se tornó un símbolo del espíritu de los “tiempos modernos”.

A partir de 1930 la opción por el automóvil como medio de movilidad va a resultar en la construcción de una serie de vías radiales reforzando la valorización y verticalización del área central y promoviendo la expansión periférica.  

En 1929 se publica el primer Código de Obras de la ciudad, estableciendo una normalización constructiva y urbana que definía un control de alturas mínimas y máximas, favoreciendo un patrón compacto de ciudad. En 1941, a través de un Decreto-Ley se libera la altura máxima en algunos sectores del centro, sujeto a  consideración específica de cada caso por las autoridades municipales. Esto abre  camino a la verticalización generalizada de la  ciudad en la década siguiente, que, diferentemente del patrón norteamericano, se apoya en una lógica de multiplicación de emprendimientos en vez de la reproducción en gran altura. Por esta razón esta verticalización no alcanza los registros norteamericanos, manteniéndose en alturas menores que 40 pisos. El único edificio que llega a los 50 pisos es el Edificio Italia.
En el debate sobre la ciudad contemporánea de las últimas tres décadas se encuentra el rescate de las áreas centrales, siguiendo una tendencia latinoamericana de rehabilitación urbana valorizando el tejido social, el patrimonio urbano y dándole atención al tema de la habitación en el centro; tema este siempre de difícil manejo en nuestro continente.

En los años 50/60 importantes modificaciones en el área central se encaminan en esta dirección, donde la función habitacional del centro pasa a estar caracterizada por la inclusión de sectores de clase media en unidades residenciales de menor superficie, a través de la incorporación de grandes edificios en sistema de condominio y de edificios-galería, como ocurría en varias metrópolis de nuestro continente. En este período se materializa el ideal de liderazgo nacional de la elite paulista a través de las obras realizadas para los festejos del IV Centenario de la Ciudad. En 1954 es inaugurado el Parque Ibirapuera  donde en 1955 tiene lugar la Feria de Industrias y la II Bienal de Artes Plásticas que le garanten a la ciudad una nueva visibilidad nacional e internacional. Es en este famoso Parque donde se localizan los edificios conectados por la gran marquesina proyectados por Oscar Niemeyer y que son sede de las Bienales. El centro se deselitiza y asume su apariencia de centro metropolitano. Una calle pasa a adquirir destaque, la “Rua Augusta”, manteniéndola hasta hoy.

En 1950 San Pablo tenía 2.200.000 habitantes y ya era una ciudad policéntrica. En esa época Rio de Janeiro contaba con 2.300.000 y Buenos Aires con 3.150.000 habitantes 7.
En la misma década se inicia el ciclo de la desconcentración industrial de San Pablo con la transferencia del parque industrial para los municipios de la región metropolitana (el famoso ABC Paulista) incluyendo el interior del estado de San Pablo.

Este proceso se identifica con la pérdida de hegemonía del modelo moderno industrial y el  paso a la etapa del capitalismo financiero internacional y se inscribe en la tendencia a la expansión creciente de las actividades de servicios (terciarias) relacionadas con las finanzas, comercio nacional e internacional, servicios especializados, cultura y esparcimiento.

En los años 60 el centro se expande englobando los barrios adyacentes, configurando un Área Central Metropolitana. A la Rua Augusta se le suma la Av. Paulista como nueva centralidad fragmentada y especializada, con características diferentes del centro antiguo. Al final de esta década se producen las demandas por mayor eficiencia en la movilidad y en 1969 se inician las obras del subterráneo de la ciudad. Entre los años 60 y 70 el centro y los barrios adyacentes reciben inversiones públicas infraestructurales importantes, al mismo tiempo que las inversiones privadas se desplazan sin correspondencia con estas inversiones.

En la década del 70 el centro se consolida como centro de los sectores populares y las elites económicas denominan este proceso de substitución, como “decadencia”.
En los años 80 surge un nuevo vector de expansión urbana verticalizado, impulsado por el capital inmobiliario especulativo como eje de localización para sede de empresas sobre la nueva Av. Faria Lima y en la región de la Av. Luís Carlos Berrini, que irá a consolidarse durante los años 90. Es principalmente la obra privada la que va transformando el tejido urbano de forma desordenada y aleatoria.

El trazo más identificable de este proceso en el perfil económico de la ciudad es el llamado “Vector Sudoeste”, área que abarca las regiones oeste y centro sur. Siguiendo las tendencias evidenciadas desde las primeras décadas del siglo XX y originado en la región del denominado Triangulo Histórico (centro originario de la ciudad) la centralidad socio económica se dirige hacia la región del Centro Nuevo (al otro lado del Valle del Anhangabaú) y después hacia la Av. Paulista, para llegar en las ultimas décadas hasta las Av. Faria Lima y Berrini. Junto con estos nuevos vectores de expansión otras áreas al sudoeste se convirtieron en centralidades sectoriales, tales como los barrios de Tatuapé y Santana. La sumatoria de las centralidades socio-económicas mas la centralidad geográfica constituye lo que se conoce como centro expandido. Las distintas clases sociales se aglomeran cada una en áreas específicas de la ciudad y se debilita la ocupación residencial del núcleo central, evidenciando la necesidad de  políticas públicas que consideren el conjunto de las áreas centrales como parte de un mismo problema de consolidación urbana.
Desde los años 90 se acentúa el perfil de ciudad de carácter marcadamente gerencial, al mismo tiempo que la nueva economía muestra el surgimiento del turismo de negocios como una fuerte tendencia, con la multiplicación de resturantes, museos,  night clubs, teatros y los shopping centers y barrios cerrados, junto con los condominios fortificados tanto para actividades empresariales como residenciales acentuando la tendencia a la fragmentación social, física y cultural, típica de las metrópolis latino-americanas en la fase de la globalización. Así, la exacerbación de la oposición entre la ciudad, la urbanidad y el espacio público es un hecho negativo verificable por doquier. San Pablo es una de las ciudades que posee más automóviles y helicópteros blindados. Esta característica de ciudad dividida entre incluidos y excluidos de los beneficios de la vida urbana tuvo sus ultimas y dramáticas manifestaciones en las eclosiones sociales que paralizaron la ciudad por dos veces a lo largo del año de 2007 8. Nombres como Capão Redondo y Brasilandia se tornaron símbolos de marginalidad en gran escala.

San Pablo presenta extremas disparidades socio-económicas, como todas las ciudades brasileras caracterizadas por áreas ricas, desarrolladas y bien cuidadas, y extensos sectores urbanos sin ninguna cualidad urbanística, paisajística o ambiental, atravesadas por violentas infraestructuras y áreas de pobreza (favelas) configurando escenarios de muy difícil “gestión”.

Esta megaciudad enfrenta problemas comunes a otras metrópolis del tercer mundo tales como deficiencia de infraestructuras, contaminación, déficit habitacional, fragmentación física y social, y problemas de movilidad entre sus partes, embotellamientos, pero en un grado mas exacerbado. Su extensa área urbana posee un carácter heterogéneo, yendo de regiones altamente adensadas y verticalizadas hasta barrios residenciales horizontales y de bajísima densidad. A pesar del gran flujo de capitales, San Pablo sufre con la mala distribución de renta, típica del país. La ciudad presenta un tipo de expansión centrífuga típico del subdesarrollo, caracterizado por el debilitamiento del centro que pierde población a una tasa de 4% al año y la expansión de las periferias que crecen a tasas del 6% anual.

Como observó Milton Santos 9, el geógrafo e intelectual paulista, la exacerbación  de los conflictos se da por la falta de oportunidades. El decía en una de sus últimas entrevistas por televisión que “en Brasil no hay ciudadanos, solo consumidores, y que falta un debate sobre los valores, pues la ciudad se amplia (en el sentido de la ciudadanía) cuando se debaten valores”. Decía que “si la oferta es solo de cosas, la idea de ciudadanía se reduce”.

La constante modificación del paisaje urbano es una característica destacada de San Pablo y podría decirse que es, históricamente, la ciudad de tres materiales: primero la ciudad de barro, después la ciudad de ladrillo y finalmente la ciudad de hormigón.

De acuerdo con Benedito Lima de Toledo 10, en el período de un siglo, entre mediados de 1870 y 1970, la ciudad de San Pablo fue totalmente demolida y reconstruida como mínimo tres veces. Esos tres períodos están caracterizados por los procesos constructivos propios de sus épocas. En un primer momento la ciudad se presentaba como un enmarañado de construcciones de “taipa de pilão” (barro y caña) situación que se extendió desde el periodo colonial hasta las ultimas décadas del siglo XIX. En el inicio del siglo XX la ciudad se transformó y pasó a ser edificada en ladrillos, utilizando métodos constructivos y estilos europeos. Con la verticalización, la expansión y la introducción del hormigón armado y el acero, la ciudad fue nuevamente demolida y reconstruida, definiendo el paisaje mas conocido.

Hoy podemos agregar a estos tres periodos un cuarto, caracterizado por el uso de técnicas de prefabricación, nuevos materiales, nuevos procedimientos constructivos y una dispersión por todo el territorio urbano de edificaciones en altura que crean un paisaje, cuando lo observamos desde lo alto, semejante a un campo bombardeado por estalactitas, sin ningún principio visible de “unidad” o cohesión.

Además de los graves problemas de inundaciones periódicas, del congestionamiento de las vias de circulación que marginan los ríos y de la falta de agua (un tema crucial en las megalópolis actuales y futuras) San Pablo presenta los  problemas derivados  de la dualidad centro-periferia todavía existente. Todo esto es una manifestación de la desigualdad socioeconómica en la ciudad (de acuerdo con Henri Lefebvre la ciudad es la proyección de una sociedad sobre el terreno) con lugares en los que este contraste es mas visible,  donde sectores económicos diversos conviven en tensión como en el caso del barrio de Morumbi, con edificios habitacionales de renta alta localizados próximos a regiones de favelas como en Rio de Janeiro. El tratamiento urbanístico-paisajístico-ambiental de los principales rios-vias de comunicación automovilística, continúa siendo una pendencia fundamental de esta metápolis.

En 2003 fue aprobado el Plan Director Estratégico del Municipio de San Pablo que define, entre una serie de objetivos para la mejoría urbanística, la utilización de instrumentos de inducción para hacer valer la función social de la propiedad de inmuebles que se mantienen con 80% de su área desocupada por más de 5 años.
En el centro de la ciudad hay casi cerca de 50.000 inmuebles vacíos según el informe de la FAUUSP-AUP0274.  San Pablo está frente a la exigencia histórica de redefinir un perfil de ciudad productiva que sea sustento de articulación urbana, social y ambiental, efectiva.

Esta megaciudad es hoy ese escenario infinitamente “estallado” donde las edificaciones, las “calles” y el “espacio público” flotan a la deriva, con una impronta  donde se expresa el “núcleo paranoico del mundo contemporáneo: el impacto de las ficciones públicas, la manipulación de la creencia, la invención de los hechos, la fragmentación del sentido, la lógica del complot” 11.


Vale do Anhangabaú

Jorge Mario Jáuregui

Bibliografía

Libros

- “La ville em débat” , editora L´Harmattan, Paris, 2003
- “El animal público”, Manuel Delgado, editora Anagrama, Barcelona, 1999
- “El malestar en la civilización”, Sigmund Freud, Tomo III, editorial Biblioteca Nueva Madrid, 1998
- “La Modernidad Superada”,  Josep Maria Montaner , editora Gustavo Pili, Barcelona, 1997
- “Formas breves”,  Ricardo Piglia, editorial Anagrama, Barcelona, 2000
-  “Mil platôs”, Rizoma, Gilles Deleuze y Felix Guattari, editora 34, São Paulo, 1995
- “Modernidad Líquida”, Zygmunt Bauman, Fondo de Cultura Económica, Buenos Aires, nov. 2006
- “O espaço dividido”, Milton Santos, editora Edusp, 2004
- “Arquitetura Brasileira Contemporânea”, Roberto Segre, Viana & Mosley editora, Rio de Janeiro, 2004
- “arquitetura Metropolitana”, Denise Xavier,  Anna Blume, San Pablo, 2007
- “ Les objects singuliers”, Jean Baudrillard, editora Calmann-Lévy, Paris, 2000
-  Diccionário Metápolis Arquitectura Avanzada, Actar, Barcelona, 2001
- “Local y Global , La gestión de las ciudades en la era de la información”, Jordi Borja y Manuel Castells, editora Taurus, Madrid, nov. de 1995
- “Metrópole”, São Paulo, 5 Bienal de Arquitetura e Design de São Paulo
- “Lês Nouveaux príncipes de L´urbanisme” , François Ascher, éditions de l´aube, Paris, 2001
-  “Prestes Maia e as origens do urbanismo moderno em São Paulo”, Benedito Lima de Toledo, editora Empresa das Artes, São Paulo, 1996
-  “Globalização, fragmentação e reforma urbana : o futuro das cidades brasileiras na crise”, Luiz Cesar Queiroz Ribeiro, editora Civilização Brasileira, Rio de Janeiro, 1994
-  “Para uma nova teoria do sujeito”, Alain Badiou, editora Relume Dumará, Rio de Janeiro, 1994
-  “São Paulo Anos 20”, editora Melhoramentos, São Paulo, 2004
-  “Edifício Martinelli”, Projeto editores associados, São Paulo, 1984
-  “Cidades estreitamente vigiadas”, Robert M. Pechman, editora Casa da Paloma, Rio de Janeiro, 2002
-  “As metamorfoses do trabalho” , Acumulação capitalista e dinâmica espacial, Pedro Cláudio Cunca Bocayuva, Fase, Rio de Janeiro, 2007
-  “Experiências em Habitação de Interesse Social no Brasil”, Ministério das Cidades, Brasília-DF, 2007   
-  “Desenvolvimento como liberdade”, Amartya Sen, Compañía das Letras, São paulo, 1999
-  “ Mutations”, Rem Koolhaas, Harvard project on the City, Actar, Barcelona
-  “Bienal 50 años 1951-2001”, Fundação Bienal de São Paulo, edición de conmemoración

Referências 

1   “Diccionario Metapolis Arquitectura Avanzada, op. cit. p.406 y 407.
El termino `Metapolis` traduce esa nueva dimensión multiple y multifacética de la ciudad contemporánea. Una realidad “mas alla “de la metrópolis tradicional. La de un sistema vibrátil, similar-generico o recurrente-a escala global y diverso-especifico- a escala local…la ciudad metapolis ya no se traduciría solo en crecimientos, sino, sobre todo en combinaciones…en interacciones con el territorio y con otros territorios; con el lugar y con otros lugares…un escenario cambiante únicamente representable mediante “cartografias oportunistas” referidas a aquellos aspectos tácticos convenientemente instrumentalizados. Una estructura análoga y diferente a la vez. Una estructura, en efecto,  de dinamicas similares a escala global y de situaciones diversas a escala local, hecha de colisiones, encuentros e intersecciones que acaban generando una gran variedad de combinaciones especificas y plurales. Un abanico de ciudades y de ciudades dentro de la ciudad…un “hiperlugar”, un “lugar de lugares”, un rico calidoscopio global de ofertas y oportunidades locales…un marco “de red”o “de redes”, dinamico, fluctuante y definitivamente inacabado…estructura construida en base a las interacciones entre capas, redes y fondos…
2 ”Sampa”, Caetano Veloso
3 “Sâo Paulo seduz cineastas,”diario Folha de São Paulo, Ilustrada, E1, 1 de julio de2007
4  Gilles Deleuze y Felix Guattari, op cit.
Denise Xavier, op cit. pag 34
6  www.prodam.sp.gov.br/dph/historia  pag.3
7  Fuente: artículo “Metropole Brasileira”, Paulistania n° 44, pag. 21
8  “Les évènements de São Paulo et Rio de Janeiro”, www.jauregui.arq.br/favelas.html
9  Milton Santos, op cit.
10  Benedito Lima de Toledo, op cit
11  Ricardo Piglia, op cit.

 

Artículos diarios/revistas/guias

- Revue Urbanisme N 345, “Quartiers sensibles”, 2005
-  Revista Arquitectura Viva, « El espacio basura «    
- Architectural Design N 64, ¾,  “The Material Organization of Advanced Capitalism”  1994, pag. 24/29
- “El retorno de lo público”, Revista del Plan Estratégico de la Ciudad de Buenos Aires, Año 1/N 1 primavera 2005
- Revista AU N 166, Año 23, Rio de Janeiro, ”Olhar interpretativo”, Josep Maria Montaner
-  Revista An Architekture N 18 , “Detect & Past City” , Elisabeth Blum, sep. 2007, pag
- 66
- “Deleuze”, Diálogos, A lógica do contágio, Revista Educação N 6, editora    Segmento, São Paulo, 2007   
- “Niemeyer 100”, Diario O Globo, Rio de Janeiro, 15 de dic. de 2007
- Revue Urbanisme N 325,  «  Âge III, la ville ouverte ‘, Christian de Portzamparc, juillet-aoùt, 2002
-  “Outra Carta Magna”, Diario O Globo, Rio de Janeiro, 14 de octubre de 2007   
- Guia de arquitetura contemporânea, São Paulo, Fernando Serapião, Viana & Mosley editora, 2005
- Revue Urbanisme  N 351, “Espaces ordinaires”, 2006
- Revista Caros Amigos Año XI número 130, pág. 12, “São Paulo 454 años, meus pêsames”

Texto elaborado para la publicación del libro San Pablo y editado con el nombre Historia Urbana, en las "Guias de Arquitectura Latinoamericana", del Diário Clarín de Buenos Aires.


Libro publicado en enero de 2009